Hasta hace no mucho tiempo, el vino y el chocolate no se llevaban bien.
Si bien, en alguna sobremesa, se podían acercar algún vino dulce con bombones y quizá, con un chocolate perdido, tal situación no trascendía el ámbito íntimo. Ningún especialista, jamás mencionaba este maridaje, salvo para dar un grito de horror: ¡Sacrilegio de neófitos!
Pero todo cambia y hoy hablar de chocolate y vino no sólo está de moda, sino que los expertos, que mencionan este maridaje, aumentan su prestigio y son atentamente escuchados.
Como siempre decimos, sobre gustos no hay verdades absolutas y si dejamos que el paladar nos guíe, seremos deliciosamente recompensados.
Entonces, ¿Qué chocolate con qué vino? Claro que no hay reglas al respecto, pero si necesita una guía para empezar a experimentar, lo mejor será tratar de propiciar un poco de armonía en esta relación ciertamente tormentosa. Porque ambos, vino y chocolate, tienen su temperamento y quieren imponerse.Cada gusto y paladar personal encontrará el modo de que ésta no resulte una relación fatal.
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