En los últimos años el vino está comenzando a ocupar un mejor lugar en el consumo de los mexicanos. País de aguardiente, el vino nunca se consumió masivamente.Los cultivos se encuentran en la Baja Califorinia en las regiones más altas, donde el clima es menos caluroso aunque resulte árido.
Distintos establecimientos elaboran vino pero las compañías más importantes son Domecq, L. A. Cetto, Santo Tomás y Monte Xanic quienes a los largo del s. XX fueron ocupando las regiones más aptas para la producción vinícola. Monte Xanic, ubicada en el Valle de Guadalupe (al sur de la frontera con los Estados Unidos) produce un chardonnay inolvidable y un cabernet sauvignon de excelente calidad. Santo Tomás (en el valle del mismo nombre) elabora muy buenos sauvignon blanc, chenin blanc y cabernet sauvignon, al decir de muchos: verdaderas joyas.
L. A. Cetto seduce con sus cabernet sauvignon, nebbiolo, zinfadel y petite syrah destinados a la exportación.
Los vinos mexicanos resultan sensuales, voluptuosos por el calor que les otorga su tierra. También. algo densos, potentes, con una acidez suave y un paladar redondo y cálido.
